La clasificación de fototipos aceptada a nivel internacional mide los tipos de piel en función de la sensibilidad a la radiación ultravioleta, la formación de eritemas o pequeñas inflamaciones de la piel y sus características. Según dicha clasificación existen hasta seis fototipos.

El primer grupo o fototipo I engloba a aquellos individuos que presentan intensas quemaduras solares, prácticamente no se pigmentan nunca y se descaman con facilidad. Son personas de piel muy clara, ojos azules y con pecas. Habitualmente su piel es muy blanca. En la exposición al sol necesitan ultra protección solar.

Dentro del fototipo II encontramos personas que se queman fácil e intensamente, pigmentan ligeramente y descaman de forma notoria. Suelen ser individuos de piel clara, pelo rubio o pelirrojo, ojos azules y pecas. Su piel es blanca. Necesitan ultra máxima protección para tomar el sol.

El fototipo III son individuos que se queman con moderación y se pigmentan. Generalmente son razas caucásicas o europeas, caracterizadas por tener la piel blanca. Necesitan protección máxima extra.

El fototipo IV está compuesto por personas que se queman moderada o mínimamente, se pigmentan con bastante facilidad y de forma rápida al ponerse al Sol. Son personas de piel blanca o ligeramente marrón, pelo y ojos oscuros. Son las razas mediterráneas, mongólicas y orientales. Se protegen del sol con protección extra moderada.

Las personas incluidas dentro del fototipo V se caracterizan por que se queman raras veces y se pigmentan con facilidad e intensidad. Siempre presentan reacción de pigmentación inmediata. Son pieles de color marrón que necesitan de una protección moderada mínima.

Por último el grupo de fototipo VI son individuos que no se queman nunca y se pigmentan intensamente. Siempre presentan reacción de pigmentación inmediata. Son las razas negras. Necesitan de una protección mínima.